A continuación una exposición sobre los reyes de Judá. Esta información ayudará a entender por qué se puede creer que el Reino de David fue suprimido con la llegada al poder de Jehoiaquim, en 607 aEC.
Nótese cómo terminaron sus días los diferentes reyes:
Rehoboam fue enterrado en la Ciudad de David.
Abiyam (Abías) fue enterrado en la Ciudad de David.
Asá fue enterrado en la Ciudad de David.
Jehosafat fue enterrado en la Ciudad de David.
Jehoram fue enterrado en la Ciudad de David.
Ocozías, quien fue muerto por Jehú, fue enterrado en la Ciudad de David.
(La reina Atalía reinó por 6 años)
Jehoás, quien fue asesinado, fue enterrado en la Ciudad de David.
Amasías , quien fue asesinado por conspiradores, fue enterrado en la Ciudad de David.
Azarías (Uzías), quien murió leproso, fue enterrado en la Ciudad de David.
Jotán fue enterrado en la Ciudad de David.
Acaz fue enterrado en la Ciudad de David.
Ezequías yació con sus antepasados. Lo enterraron en la subida a las sepulturas de los hijos de David.
Manasés fue el rey que llevó a Judá a un pecado grave, y por eso fue capturado y llevado con grilletes de cobre a Babilonia. Allí habría terminado sus días, pero se arrepintió y fue restaurado. Al final yació con sus antepasados y lo enterraron junto a su casa, en el jardín de Uzá.
Amón, quien fue asesinado en una conspiración, fue enterrado en su sepulcro en el jardín de Uzá.
Josías murió a manos de Nekoh el rey de Egipto. Fue transportado desde Meguidó hasta su sepulcro en Jerusalén, en el cementerio de sus antepasados.
Jehoacaz fue puesto en cadenas en Riblá por el Faraón Nekoh, para que no reinara en Jerusalén. Fue llevado a Egipto.
Jehoiaquim fue instalado como rey por el Faraón Nekoh. Luego fue siervo de Nabucodonosor el rey de Babilonia. Murió, según Jeremías, con el entierro de un asno, "con un llevar arrastrando y un echar afuera, más allá de las puertas de Jerusalén".
Joaquín fue llevado al destierro por Nabucodonosor el rey de Babilonia. Nunca regresó a Jerusalén, aunque vivió muchos años en el destierro.
Sedequías fue capturado en el asedio contra Jerusalén. Fue juzgado en Riblá, cegado y llevado en grilletes de cobre a Babilonia.
De este resumen, basado en mi estudio de la Biblia, llego a la conclusión de que los últimos cuatro reyes (Jehoacaz, Jehoiaquim, Joaquín y Sedequías) no fueron enterrados con sus antepasados en Jerusalén, lo cual significa que no se les considera legítimos gobernantes de la dinastía de David.
Esto demostraría que Dios representa la restricción del gobierno de David con el destierro o el morir fuera de Jerusalén. En consecuencia, los siete Tiempos de restricción sobre el Reino de Dios comenzaron en los días de Jehoiaquim (607 aEC), un gobernante que estuvo siempre sujeto a reyes de las naciones, como el Faraón Nekoh y el rey de Babilonia.
Así pues, los JW estuvieron en lo cierto al escoger 607 aEC como principio de 2520 años que culminarían en 1914 EC, pero este principio no habría coincidido con la destrucción de Jerusalén y su templo.
Cosa de verlo con cuidado. En realidad, he hallado pruebas cronológicas que dicen que el templo fue destruido en 586 aEC, en el año 19 de Nabucodonosor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario