Según ciertos estudios realizados por cristianos observadores, las siete congregaciones son siete clases de cristianos que han ido formándose desde que fue restaurado el cristianismo en el siglo XX. Con el discernimiento adecuado, podemos visualizar lo que estás congregaciones son.
Sin ser cerrados al entendimiento, con la actitud correcta, es posible identificar de qué congregaciones estamos hablando. Sin embargo, tengamos en cuenta que la verdad final de dará a conocer cuando venga el juicio de Jesús contra su propio pueblo. Mientras tanto, aprendamos de los mensajes a las siete congregaciones como dirigidos a nosotros.
La primera congregación (Éfeso) es la que dirigió el mensajero Charles Russell, hasta 1916. Esta congregación tuvo que exponer por primera vez el falso cristianismo. También tuvo que revivir el amor verdadero hacia el Mesías.
La segunda (Esmirna) es la que dirigió el mensajero Joseph Rutherford, hasta 1941. A esta congregación, rica en sentido espiritual, le tocó sufrir persecución severa, hasta el grado de sufrir prisiones por falsas acusaciones de los falsos cristianos.
La tercera (Pérgamo) es la que dirigió el mensajero Nathan Knorr, hasta los años 70. Fue en sus días que se identificó el "trono de Satanás", la Bestia que ha de reinar, la Organización de las Naciones Unidas. A partir de aquí existe el peligro de la enseñanza de Balaam (fornicación espiritual e idolatría).
La cuarta (Tiatira) es la que dirigió el mensajero Frederick Franz hasta 1992. En sus días, aumentó en gran manera la obra de los JW. No obstante, también surgió la clase Jezabel, un poderoso grupo de cristianos que está en oposición a los profetas y que enseña idolatría, la cual será expuesta ante todo el pueblo cuando Jesús traiga juicio contra sus siervos. Para entender qué es esta clase, uno tiene que saber cómo actuó Jezabel en el pasado, como corregente del rey de Israel. Felizmente, también hay cristianos que no se dejaron influir por las "cosas cosas profundas de Satanás" y mantienen su fidelidad.
La quinta (Sardis) es la que dirigió el mensajero Milton Henschel hasta el cambio de siglo. Hubo un tiempo de somnolencia espiritual para muchos, sobre todo porque el entendimiento acerca de las profecías disminuyó. A estos cristianos se les invitó a despertar.
La sexta (Filadelfia) es la congregación fiel que existe en nuestros días, la cual prospera a un grado sin precedentes, con las puertas abiertas a nuevos campos para testimonio. Curiosamente, fue después de Henschel que la presidencia se hizo rotativa. Esta clase de cristianos será alabada y reconocida como verdadera por el falso cristianismo al tiempo del juicio. También, por su fidelidad, será guardada de la "hora de la prueba". Es la clase de los Dos Testigos.
La séptima (Laodicea) es la congregación "tibia" que no está despierta, la cual convive con la fiel. Sobre ésta vendrán reprensiones y juicios, porque no se identifica plenamente como cristiana. Jesús los censura por amor, y desea que se arrepientan a tiempo, porque él está "a las puertas", cuando viene el Reino de Dios. Este grupo será tomado por sorpresa, así que tiene que arrepentirse rápido.
Ahora, solamente queda preguntarnos a nosotros mismos (si es que somos parte de la congregación de los JW): "¿A qué congregación pertenezco? ¿A la de Filadelfia o a la de Laodicea?"
Ya depende de nosotros mismos.
Ahora bien, en Apocalipsis 14 también se hace referencia a los mensajeros en la secuencia correcta. Esta visión tuvo una primera aplicación cuando nació el Reino en los cielos, desde 1914 en adelante. Sus mensajeros eran los de la clase José, el Esclavo Fiel y Discreto.
El mensajero que vuela en los cielos con las buenas nuevas eternas correspondió con Russell: "Teman al Dios y denle gloria, porque llega la hora de su juicio". Eran los días de la Primera Guerra Mundial.
El mensajero que denuncia a Babilonia la Grande y su caída correspondió con Rutherford. En sus días, los mensajes contra el falso cristianismo fueron muy severos.
El mensajero que denuncia la adoración a la Bestia y su imagen (las Naciones Unidas), fue Knorr. Eran los días de la Segunda Guerra Mundial.
Ahora bien, Apocalipsis 14 se cumple finalmente cuando el Reino de Dios es completado en su composición, es decir, cuando se completa el sellado de los 144.000. Esto ocurre cuando nace la clase Benjamín. Es por ello que los mensajes que siguen en la visión se asocian a la venida del Hijo del hombre (la Simiente Prometida) y los mensajeros del santuario completado.
Los mensajes de los tres primeros se harán mundiales, y mantendrán la misma secuencia:
(1) La hora del juicio ha llegado.
(2) Babilonia la Grande ha caído.
(3) No adoren a la Bestia y su imagen.
Entonces ocurren los siguientes eventos:
(1) Felices los que mueren en el Señor desde este tiempo en adelante.
(2) La hora de la siega ha comenzado.
(3) La hora de la vendimia ha llegado y se pisoteará el lagar hasta una distancia de 1600 estadios.
Yehóvah nos invita a todos a tomar en cuenta que el fin está cerca y que debemos tomar acciones correctas como cristianos verdaderos.
Estemos despiertos.