martes, 13 de diciembre de 2016

Preguntas sin respuesta oficial

Hay preguntas que hasta ahora no tienen respuesta oficial, y son importantes. Son preguntas que los cristianos tradicionales no pueden concebir, pues no tienen las bases. Sólo los testigos de Jehová pueden asimilarlas, aunque es irónico que no las conozcan.

¿Por qué existen tres periodos de siete Tiempos que preceden a la venida del Mesías en diferentes momentos históricos?

¿Por qué no se acepta la evidencia abrumadora de que Israel fue llevado a la desolación en 587-586 a.e.c.?

¿Qué tienen que ver los islámicos y la ciudad de Jerusalén con el fin de los tiempos?

¿Por qué no se establece una relación de paralelismos entre Adán, Israel y el templo?

Si bien es cierto que las respuestas podrían intuirse con perspicacia y sentido común, parece que será la Gran Tribulación la que revele la verdad.

Para mí y para muchos, este conocimiento faltante como que causa desazón, sobre todo porque entender el sentido profético y cronológico de las Escrituras fue el móvil que me llevó a hacerme testigo de Jehová hace más de 25 años. Sólo tengo la esperanza de ver un día aclarados estos misterios.

Esas son preguntas generales, por decirlo así. Aparte hay preguntas particulares, que salen de las investigaciones.

La evidencia dice que la Era del Pacto Abrahámico se expande por 11 Tiempos,  es decir, 3960 años. En el centro de este período está el principio de la obra profética cristiana. Pensamos que el centro de este período, que prácticamente ya acabó, estaba en el sacrificio de Jesús, en el año 33. Luego, hasta hace poco, pensamos que ese centro estaba en el final de las Setenta Semanas, en el otoño del 36. Y ahora no sabemos cuándo exactamente se dio ese centro. Quizás medio año después, como parte del ajuste del calendario bíblico.

Alguien sugirió que quizás nuestra cronología tiene un error fundamental en el caso del sacrificio de Jesús. Isaac Newton decía que aparte del año 33, el año 34 se presentaba como una posibilidad fuerte. Bueno, eso es cierto, y a veces me veo tentado a replantear todo en vista de los hechos.

Quizás Jesús fue bautizado en el otoño del 30, unos 2400 años desde el Diluvio (2371 a.e.c.). Quizás Masada cayó, como dicen algunos, en la Pascua del 74, unos 1335 días después de la destrucción del templo. Quizás los eventos de noviembre de 1517, 1917, 1947 y los que vienen en noviembre de 2017 estén encadenados.

Francamente, no tengo claras las respuestas a estas cuestiones. Pero sé que las investigaciones realizadas nos han llevado por un camino de entendimiento que ha valido la pena conocer. Sólo queda esperar más luz de los eventos que están por venir.

Mientras tanto, hay algo que es invariable. Están por completarse 3960 años desde la validación del Pacto Abrahámico. Todavía está a la vista una pista fundamental.

Bendiciones

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Bienvenidos

Este es el primer vídeo del canal de Julius Corvus. A partir de ahora, visite: https://juliuscorvus.blogspot.pe El fin de los tiempo...